Una piel sana y radiante nos hace sentir seguros y sanos, sin embargo, puede que en algún momento de nuestras vidas la dermatitis atópica se apodere de toda la belleza y frescura de nuestro rostro, pero no hay de qué preocuparse, con una limpieza adecuada, aplicando una crema dermatitis atópica y siguiendo algunos cuidados básicos, este problema se puede controlar en poco tiempo.

Por lo general, es una enfermedad crónica y presenta erupciones en el cutis, resequedad, comezón, enrojecimiento, secreciones, costras y descamaciones; síntomas que son verdaderamente molestos y afectan sin duda alguna nuestra autoestima y calidad de vida.

No existe una causa específica del cutis atópico, algunos especialistas aseguran que se debe a factores genéticos y ambientales, pero lo que sí se sabe es que con adecuados cuidados en la rutina de limpieza, los síntomas pueden mejorar significativamente.

La hidratación es un elemento indispensable en cualquier hábito de cuidado y funciona para aliviar la afección, por ello, los médicos recomiendan una crema dermatitis atópica y una limpieza adecuada para regenerar la cara y devolverle la belleza natural que la caracteriza.

Rutina adecuada contra la dermatitis

Cuidar una dermis atópica no implica un proceso complicado, solamente se requiere: limpiar, hidratar y proteger.

  • Limpieza: por lo general, los especialistas recomiendan bañarse y lavar las áreas con jabones libres de pH y perfumes, y aunque la humectación es imprevisible para observar buenos resultados en poco tiempo, exponerse al agua con frecuencia no es recomendable; preferiblemente, se debe mantener poco contacto y hacer duchas lo más breves posibles. No hay que olvidar que la temperatura del agua debe estar al natural.

Hay que tener en cuenta, que para secar la dermis afectada es aconsejable usar toallas de material de algodón, pues aquellos elaborados de lana o tejidos sintéticos causan comezón y empeoran más la sintomatología del paciente.

  • Hidratar: las cremas hidratantes y otros productos humectantes pueden ser aplicados durante el día al menos 2 o 3 veces y cuando la piel esté húmeda, como por ejemplo, después de bañarse o lavar.
  • Proteger: adicionalmente, evitar en lo posible rascarse o rozar la piel con telas, objetos y productos, ya que estos generan rupturas en el cutis afectado y agravan la infección. Asimismo, evitar en lo posible exponerse a climas muy fríos o soleados.

Estos son algunos pasos para cuidar pieles sensibles y atópicas, no obstante, es mejor consultar al médico de cabecera y seguir sus recomendaciones para combatir esta molesta enfermedad cutánea.

crema dermatitis atopica

 

Deja una respuesta